Cojos y reprimidos
así cayeron
los que habían planeado
el suicidio de una patria
de mestizaje y mucho esmero,
así fueron destronados
los ladrones del cielo
de las oscuridades de aquel palacio
que ahora es un infierno
Cayeron los pulcros
los nobles, y los más bellos
al parecer eso era un reality
hecho con veneno sincero
con acciones voluntarias
esas que solo sirven
para ser un ladrón de sueños
Ahora dejaron un pueblo
lleno de huecos
con gente humilde
y deseosa de cambios abiertos,
con la conciencia tranquila
pero el deber por cambiar el rumbo
de mi pueblo querido
que solo ha demostrado
ser a veces cobarde y ciego
Hasta que por fin cayeron
los que le sonrieron al pueblo
con gestos, caricias y versos
de palabras exageradas
y tonos que daban miedo
Ahora espero que
un tamal no sea la excusa
para elegir al que si es verdadero
al que puede cambiar el rumbo
de mi tierra que solo respira
amor del bueno.
Ahora solo espero que
las promesas se las lleve el viento
y que cuando sean coronados
las palabras se conviertan en los reales hechos
en el anhelado desarrollo
para ser pioneros en
un paraiso verde, exótico y eterno
